Un ionizador es un dispositivo diseñado y creado específicamente para neutralizar la electricidad estática de los productos. Su principio de operación consiste en ionizar el aire que rodea a una aguja a la cual se le aplica alta tensión, cuando el gradiente eléctrico supera la rigidez dieléctrica del aire se manifiestan pequeñas chispas o descargas a escasos centímetros de esta, lo cual permite neutralizar cargas estáticas mediante el aire.